Riazor entró en silencio en un minuto de respeto por Emilio Quesada, socio número tres del Deportivo y después explotó de pronto. La Cultural movió la primera pelota, quiso estirarse, pero a los quince minutos se encontró con el primer golpe. Un error en la salida de balón de Rodri Suárez lo aprovechó Eddahchouri para plantarse ante Badía y definir a placer: 1-0. Ocho minutos después, el partido ya pintaba cuesta arriba. Otro fallo en la zona sensible terminó en recuperación del propio Eddahchouri, que asistió a Mario Soriano para que cruzara el 2-0. Dos zarpazos y demasiada cuesta para los de Ziganda.
Aun así, el equipo leonés no se descompuso. Mboula probó desde la izquierda, Thiago Ojeda lo intentó desde media distancia y Selu Diallo tuvo la más clara antes del descanso: con todo a favor, su remate se marchó alto. El Deportivo, sólido atrás y cómodo con la ventaja, dejó que el reloj hiciera su trabajo rumbo al intermedio.
La segunda parte se abrió con propósito culturalista. Mboula puso un balón que nadie cazó en la boca de gol y la presión alta pareció activar al cuadro leonés. La respuesta local fue inmediata: Yeremay estrelló un disparo en el larguero y el posterior cabezazo de Eddahchouri se fue por encima. Se movieron los banquillos: José Ángel entró por Gragera en el Deportivo, Bicho y Paco Cortés dieron aire al medio del campo culturalista por Mboula y Thiago. Siguió el pulso: la Cultural quiso la pelota y la grada visitante apretó, pero el conjunto coruñés supo administrar el ritmo y esperar su momento.
Llegó en el minuto 75 del partido. Eddahchouri se fabricó el espacio y, de disparo cruzado, firmó su doblete y el 3-0 que cerró la noche. El Riazor se puso en modo fiesta, Stoichkov y Luismi saltaron al césped para refrescar al líder y el delantero franco-marroquí dejó su sitio a Cristian Herrera. En el tramo final, Arnau Comas necesitó atención tras un golpe con su portero y José Ángel vio la amarilla. Bicho rozó el autogol en una acción desafortunada que resumió el tipo de jornada que fue para los de León.
La Cultural compitió por fases, empujó tras el descanso y generó llegadas, pero pagó caros los errores iniciales y la falta de puntería. El Deportivo, serio e implacable, no perdonó y se llevó un 3–0 tan contundente como ilustrativo: en Riazor, los fallos se pagan caros.
