- La decana de la facultad de Ciencias Biológicas y Ambientales de la ULE, Laura López Campano, trasladó al equipo docente la “responsabilidad proporcionar una formación excelente y exigente” que permita a los egresados “ser líderes de la sociedad, capaces de crear nuevas profesiones que ahora no existen”
- El acto académico sirvió para homenajear a los alumnos de la tercera promoción de Biología por su 50º aniversario, entre ellos el ex decano José Carlos Pérez Álvarez, que recordó que cuando “empezaron no se sabía bien qué era la biología”
La facultad de Ciencias Biológicas y Ambientales de la Universidad de León ha cerrado hoy los actos en honor a su patrón, San Alberto Magno con un acto académico en que la decana, Laura López Campano, ha abordado los retos de presente y futuro que hay para los egresados de la facultad y ha asegurado que “la Agenda 2030 y sus diecisiete objetivos de desarrollo sostenible marcan y marcarán el entorno académico y profesional” de alumnos y egresados.
Queda, ha añadido, “un largo camino de protección de los ecosistemas terrestres, los océanos, la calidad del aire, los bosques, la biodiversidad, la salud humana y el clima” y, por ello, en este escenario “en una Tierra con un futuro incierto y retos, tal vez, inimaginables”, ha trasladado al claustro de la facultad “nuestra responsabilidad, como docentes en una universidad pública, proporcionarles una formación excelente y exigente” a los alumnos, “una formación sólida que les permita ser líderes de la sociedad capaces de crear nuevas profesiones que ahora no existen”.
Por su parte el vicerrector de Actividad académica, Julio Abad, felicitó el equipo decanal por el compromiso con “la calidad y la excelencia que ha hecho que esta facultad esté entre las cinco mejores de España” y trasladó el apoyo del equipo rectoral en la renovación de los grados que se imparten en la facultad. Además, felicitó a los licenciados que salieron de ella hace 50 y 25 años, al PTGAS y PDI que se jubiló el curso pasado y a los premiados con los mejores expedientes a los que también trasladó la necesidad de que “se sigan formando, que no se conformen con el título” y sigan “por la senda de la excelencia”.
El acto académico lo abrió David Llamas Alonso, director de sostenibilidad y ESG para Españay Portugal de la consulta internacional WSP con la conferencia ‘25 años de evolución de la consultoría ambiental en España’ en la que relató su experiencia profesional tras terminar su licenciatura en la facultad de Biológicas y Ambientales de la Universidad de León. Entre los proyectos que explicó, destacó el de la construcción de un tramo de la A67, en Cantabria, entre Molledo y Pesquera, en el que se encargaron del estudio de impacto ambiental y de alternativas y también realizaron la dirección ambiental de la obra, “cerramos el círculo” de un proyecto que “fue de los primeros en contar con una dirección ambiental” en la construcción y que puso en marcha “medidas innovadoras” en su construcción como el viaducto más alto de España y el segundo de Europa.
HOMENAJE A LOS RECIÉN JUBILADOS Y A LOS LICENCIADOS HACE 50 Y 25 AÑOS
El acto sirvió también para homenajear y entregar las distinciones honoríficas a los profesores y PTGAS que se jubilaron el curso pasado. En su nombre, habló el profesor Arsenio Fernández López, que sacó una sonrisa al asegurar que los “alumnos son las mitocondrias de la universidad, que aportan energía y nos obligan a mirar hacia adelante más que hacia atrás”.
Fueron homenajeados también los alumnos y alumnas de la tercera promoción de Biología por su 50º aniversario (1974-2024), uno de ellos, José Carlos Pena Álvarez, que fue decano de la facultad, habló en nombre de ellos y aseguró que “cuando empezaron no se sabía bien qué era la Biología”, recordó que nacieron de la mano de la facultad de Veterinaria y que cuando llegó el primer catedrático de Biología, el profesor Nadal (fallecido el año pasado) el titular de la prensa fue “llega el primer catedrático de corderos y vertebrados”, fue en 1970. Terminó su intervención con la canción de Cold Play ‘Viva la vida’ y deseando “larga vida a la facultad, viva la Biología y viva la vida”.
Homenaje también para los que se licenciaron hace 25 años, de la promoción de Biología 1994-1999 tomaron la palabra Susana Pedrosa y Noelia Valbuena que hicieron reír a los compañeros recordando sus inicios, “las excursiones, los paseos por los mercados viendo peces, la primera y última excursión a las bodegas de Rueda”. Vivencias, resumieron que están “grabadas en el ADN que se va a expresar como un gen dominante”. Aseguraron que sus estudios les han proporcionado “herramientas y valores” para la vida y calificaron de “gran familia” la que forman con los compañeros de promoción y no se olvidaron de recordar “a los que se han ido demasiado pronto”.
Por parte de los licenciados hace 25 años en Ciencias Ambientales, Ana Isabel Brit Álvarez, aseguró que es “un honor estar aquí 25 años después”, calificó de “pequeños David ante el gran Goliat como el cambio climático” su trabajo diario, pero aseguró que “debemos reconocer las pequeñas y grandes victorias de cada uno por y para el medioambiente”.
PREMIOS A LOS MEJORES ALUMNOS Y ALUMNAS
En el día de San Alberto Magno se entregaron también los premios extraordinarios de fin de carrera a los mejores expedientes, en el caso del grado en Biología fue para Antonio San José González, el de Biotecnología para Sergio Fernández Martínez y el de Ciencias ambientales para Rodrigo Arévalo González.
También se anunció el premio y accésit ‘Fin de carrera INSUD-Pharma’ al os mejores expedientes del grado de Biología, que fue para Antonio San José y el accésit para María Santos Villadangos. El reconocimiento de la facultad de Ciencias Biologías y Ambientales al mejor expediente en el grado de Ciencias Ambientales fue para Rodrigo Arévalo González y, finalmente, el premio y accésit ‘DSM-Firmenich-Vitatene Awards for Academic Excellence’ a los mejores currículum del Grado de Biotecnología fue para Sergio Fernández Martínez y el accésit para Marina Serna Ostalaza.