Después de varias jornadas de intenso calor en León, este viernes se vivirá un poco de alivio con 23-24 grados, lejos de los casi 28 que se registraron en los pasados días. Las primeras horas del día seguirán siendo frescas con solo 7 grados de mínima, por lo que será preciso, como es costumbre, llevar una chaqueta o cazadora de entretiempo para superar ese tiempo hasta que el sol vaya calentando. Algo que ocurrirá rápidamente porque ninguna nube se lo va a impedir.
Una situación muy similar se vivirá el fin de semana, cielos despejados y muy soleados, 23 y 24 grados, pero mínimas en descenso, con 5 y 6 grados. Nuevamente jornadas para vivir al sol mientras esté presente, pero para abrigarse moderadamente cuando se oculte.