- La artista ha pasado la tarde en La Cepeda, que vive su 39ª Fiesta Comarcal, antes de dar un concierto en la medianoche
- “Sigo mi camino intentando hacer el bien a través de mi música”
Rosa López ha disfrutado de La Cepeda antes de ofrecer un concierto con su prodigiosa voz a todos aquellos que han asistido a la 39ª edición de su tradición fiesta. Lo primero que le ha llamado la atención a la eurovisiva cantante ha sido el camino hasta llegar a las inmediaciones de embalse de Villameca, tanto que incluso ha confesado que dudaba de si la gente llegaría hasta allí para asistir a su concierto. Sin embargo, ese miedo se le ha quitado cuando ha comprobado la majestuosidad del paisaje que, según ha confesado la ha enamorado, asegurando que estar ahí en La Cepeda, “es un paraíso”, estar en mitad de esta naturaleza es un “lujazo”.
La ganadora de la primera edición de Operación Triunfo ha comentado que ella sigue su carrera y su camino “intentando hacer el bien a través de su música”: “Sin ponerle nombre ni etiquetas, simplemente usando mi música para intentar decirle a estos jóvenes, menos experimentados aunque muy inteligentes, a los que llaman la generación de Cristal, que no tengan miedo, a través de ‘Power’ y de ‘Vacío’, una canción de 2019 que me conecta mucho con las personas, porque es verdad que a través de ese vacío, aunque suene cursi, es como intentamos ser mejores personas”. Así explica el significado de esos ‘Doce diamantes negros’, su último álbum: “Por eso quiero hacerles entender, darle la vuelta a la tortilla a esa juventud, para que vean que equivocarse no es malo, es todo lo contrario, es bueno”.
Reinventarse y volver a brillar
Respecto a la velocidad del panorama actual musical en la que cada hit funciona muy poco tiempo, la música se consume muy rápido y sin tiempo de poder crear grandes temas. Ella por su lado ha experimentado la gran fama de ganar un programa pionero como fue Operación Triunfo que le llevó a representar a España en Eurovisión con Europe’s living a celebration, y posteriormente llegó la caída, que le llevó a una reinvención y un gran cambio de mentalidad y relanzó su carrera. En este sentido, Rosa López asegura a veces puedes ganar un programa o no, “al final todo es relativo”, hay gente que gana un programa y pierde muchas otras cosas, ha manifestado. “Realmente, creo que lo bonito en esta vida es hacer caso de tu esencia, de ese poder que todos tenemos, materno, de nuestra madre y nuestro padre, de lo que te da fuerza para seguir para adelante. Esa es nuestra esencia, no corromperla”.
Y se pronuncia respecto a esta sociedad de la inmediatez en la que vivimos inmersos. “Al final tanta comida rápida, tanta música rápida, mensajes banales… a veces me da la sensación de sentirme carca por querer esto para los jóvenes, pero yo me siento joven y cada vez más, tengo más salud que cuando tenia 14 años”.
Confiesa que por ese motivo ha cambiado su mentalidad: “Todo el rato quiero explotar que se puede, que no pasa nada por caerse, que es bonito, que es lo que tiene que pasar, que no hay que evitarlo, hay que afrontarlo, y es bonito, que es como tenemos que aprender, si no, no se nos quedan las cosas”. También dice la conocida cariñosamente como Rosa de España, que tenemos el apoyo de nuestros padres pero no son eternos, por eso hay que madurar y “controlar esas frustraciones cuanto antes, ser resistentes, cada vez somos menos resistentes, hablo en general, no sabemos hacer nada… Por ejemplo, estar aquí en mitad del campo, hay que valorar más la naturaleza, la agricultura, los valores de familia… a los jóvenes a veces les entra por un oído y les sale por otro. Pero al final, lo que no hayas hecho en un momento de tu vida lo vas a entender, y cuanto antes afrontes las frustraciones, mejor”.
Rosa López ha querido compartir estas reflexiones antes del concierto de la medianoche de este jueves al viernes, en el que La Cepeda vibrará con la voz de una de las mejores cantantes y más queridas de nuestro país.
La Fiesta comarcal de La Cepeda celebra su 39ª edición, con el concierto de Rosa López como colofón
