- Así lo ha confirmado el consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, quien visitó esa unidad del Bierzo
- Estos servicios han atendido ya a 6.000 pacientes
El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, ha visitado la Unidad del Dolor del Bierzo, ubicada en el Centro de Salud Ponferrada IV, en el barrio de Cuatrovientos, donde ha asegurado que las provincias de Salamanca, Zamora, Segovia y Soria contarán antes de fin de la legislatura con sus propias Unidades de Afrontamiento del Dolor Crónico.
Se trata de unidades por las que ya han pasado 6.000 pacientes de toda la Comunidad, en la del Bierzo 40, en las que se enfronta el dolor, con un enfoque de tratamiento que cambia el paradigma del tratamiento pasivo al buscar que el paciente sea una parte activa y proactiva en el manejo de su dolencia. Además, se trata de afrontar el dolor de manera multidisciplinar, con fisioterapeutas, rehabilitadores, médicos de Atención Primaria y profesionales de salud mental, más allá de la farmacología.
“Esta es una patología crónica enormemente prevalente. Se calcula que aproximadamente el 20 por ciento de la población sufre estos problemas y el hombre, desde que tiene conciencia, viene luchando contra el dolor”, dijo Vázquez, quien explicó que hasta ahora la forma de tratarlo era la misma que el dolor agudo, “interviniendo directamente sobre las partes dañadas o intentando bloquearlo mediante fármacos”, según informa la agencia Ical.
Ahora estas unidades tratan al paciente de forma global, “lo que es una concepción holística y biopsicosocial del dolor, viendo también las condiciones que rodean al paciente y evitando, en gran medida, el consumo de fármacos”, añadió el consejero.
Solo en 2024 en Castilla y León se recetaron 7,5 millones de unidades de medicamentos para el dolor, con una inversión de 50 millones de euros. “No es tanto el tema económico sino que estos analgésicos, tomados de modo continuado, pueden crear en la sociedad problemas”, continuó Vázquez, quien aseguró que esta nueva estrategia está dando buenos resultados.

La Unidad de Afrontamiento del Dolor Crónico de Ponferrada, que se puso en marcha en abril, ha atendido hasta ahora a 40 pacientes, aunque hay más de 200 que ya están en la lista y la idea es ir incorporando, poco a poco, más profesionales y extender la atención al medio rural, según dijo el coordinador de la Unidades de Dolor, Federico Montero.
“Hasta ahora se ha tratado a los pacientes con una etiqueta diagnóstica, es decir, por una lumbalgia crónica o una estenosis. Ahora tratamos a la persona porque se ha demostrado que el dolor crónico afecta, en mayor o menor medida, a todas las dimensiones del individuo”, dijo Montero. “Es un trabajo transdisciplinar en el que abarcamos la mejora de todas las funcionalidades”, añadió.
Montero también explicó que con los años se ha visto que la forma en la que se trataba el dolor crónico no era la correcta, lo que ha hecho se haya duplicado la prevalencia de esta patología.
“Este es un proyecto que se creó en Valladolid, que se ha exportado a nivel internacional y a otras comunidades. Y es para nosotros un orgullo”, afirmó el consejero.
La unidad de Ponferrada diseña tratamientos individuales y de momento cuenta con dos fisioterapeutas y se están incorporando más profesionales. Además, la media de edad de las personas con dolor crónico se sitúa en los 51 años, por lo que muchos pacientes son muy jóvenes, incluso niños que son tratados en el área infantojuvenil.


