El sindicato Justicia Policial (Jupol) ha presentado una denuncia ante la Jefatura Provincial de la Policía Nacional en León para solicitar una investigación sobre lo que considera “graves irregularidades” cometidas por el jefe de la Comisaría de Astorga. Según la organización, el mando podría haber hecho un uso indebido de un vehículo oficial y protagonizado comportamientos “vejatorios” hacia los agentes bajo su mando.
En un comunicado, Jupol asegura que el responsable policial habría utilizado un coche camuflado asignado al servicio para desplazamientos personales durante fines de semana y festivos, incluso en compañía de su pareja. El sindicato pide que se revisen los registros GPS y los recorridos del vehículo para confirmar los hechos.
Un desvío de ruta y un incidente no registrado
El sindicato añade que, el pasado 17 de octubre, tras asistir a un curso en Madrid destinado a formar instructores de expedientes disciplinarios, el jefe de la comisaría se habría desviado de su trayecto oficial hacia la localidad madrileña de Arganda del Rey. Durante ese desplazamiento, el coche oficial sufrió una avería.
De acuerdo con Jupol, el mando “habría intentado ocultar” el incidente, ordenando que no se reflejara en los partes de servicio ni en los registros de la sala operativa, una actitud que califican de “muy grave”. El sindicato destaca la contradicción de que la persona encargada de instruir expedientes disciplinarios “sea la primera en incumplir las normas que debería vigilar”.
Clima laboral tenso y denuncias por acoso
Más allá del presunto uso irregular de medios públicos, Jupol denuncia un “trato autoritario y degradante” por parte del jefe hacia los agentes de la comisaría. Según su testimonio, varios policías habrían llegado a abandonar sus puestos “entre lágrimas” tras sufrir humillaciones, lo que habría generado un “ambiente laboral insostenible” en la plantilla de Astorga.
El sindicato recuerda que este tipo de conductas “vulneran los principios de respeto, dignidad y ejemplaridad que deben regir en el seno de la Policía Nacional” y que los abusos de autoridad “no pueden quedar sin respuesta”.
Por ello, Jupol ha elevado un escrito formal a la Jefatura Provincial de León solicitando una investigación urgente que esclarezca los hechos, tanto los relativos al posible uso irregular del vehículo como al trato hacia los subordinados, y que se depuren las responsabilidades que correspondan.
