- La subdirectora de Enfermería del Hospital San Juan de Dios de León señala -en el marco del día mundial de la Enfermería, que ha sido este viernes 12 de mayo- el rol de la profesión en varios de los proyectos del plan estratégico en los que el centro está trabajando
- “Estamos desarrollando un modelo de humanización en la salud 4.0 con el fin de aprovechar el desarrollo de las nuevas tecnologías para innovar y desplegar servicios al paciente capaces de satisfacer sus necesidades y expectativas”, asegura.
Bajo el lema ‘Nuestras enfermeras. Nuestro futuro’, este viernes se ha celebrado una efeméride que conmemora el nacimiento de Florence Nightingale, reconocida como pionera e impulsora de la enfermería moderna.
- La Dirección de Enfermería ya ha desarrollado las primeras dinámicas de trabajo con los pacientes y sus familiares, además de asociaciones de pacientes. Para ello, se está apostando por un sistema participativo a través del ‘design thinking’. ¿En qué consiste esta metodología?
Hace justo un año, con la colaboración de Elena García García, directora del Departamento de Investigación de la Fundación San Juan de Dios (FSJD) de la Universidad de Nebrija, se celebraron dos sesiones de trabajo: una dirigida a usuarios, familiares y representantes de asociaciones de pacientes -Alzhéimer León y Asociación Española contra el Cáncer (AECC)- y otra a profesionales sanitarios y no sanitarios del entorno hospitalario. El objetivo fue poner la experiencia del paciente en el eje central de nuestra atención. Esta sesión de trabajo se realizó con el método de ‘design thinking’ y se desarrolló en cinco fases que van desde la empatía al testeo pasando por la definición del problema a abordar, las ideas o respuestas al mismo y el prototipado. Se trata de una metodología centrada en la persona que persigue generar soluciones a problemas detectados de una manera activa creando una cultura creativa e innovadora. Se valoró la experiencia del paciente durante el ingreso y la experiencia del cuidador en base a la información obtenida en los talleres de nuestra Escuela de Cuidamos.
El 3 de mayo de este año se ha llevado a cabo otra sesión participativa con la misma metodología. Se trabajó con familiares, pacientes y asociaciones de pacientes, en este caso con Aspaym (lesión medular y otras discapacidades físicas) y Adile (diabetes). Esta sesión ha estado enfocada a pacientes con daño cerebral y pacientes diabéticos, se ha trabajado de nuevo sobre un mapa de empatía valorando la estancia hospitalaria y así como varias áreas del hospital diferentes la unidad de hospitalización. También se solicitó su colaboración para valorar los recursos de educación sanitaria proporcionados durante el ingreso hospitalario y se les comunicó los resultados del informe de satisfacción de pacientes del año pasado realizado con el sistema Ratenow Analytics 2.0, la plataforma de Experiencia del Cliente de RateNow.
Estas sesiones permiten identificar los puntos clave que pueden afectar al paciente en su experiencia (prems) y los resultados que ellos perciben (proms) de cara a detectar oportunidades de mejora y proyectar su desarrollo los más rápido posible.
- ¿Y qué conclusiones se han extraído en esta fase de ‘feedback’ con los pacientes, familiares y asociaciones?
Ya se han propuesto una serie de mejoras que han quedado reflejadas en el proceso hospitalario. Alguna de ellas son la mejora de la educación sanitaria al alta, la ampliación de los temas a tratar en la Escuela de Cuidados, el desarrollo de acciones que impliquen a los familiares en la atención, el cuidado de los pacientes como la prespecialidad en las habitaciones, aumentar al alta la información sobre asociaciones de pacientes y donde conseguir ayudas técnicas a la dependencia, creación de una sala de respiro y una de mascotas.
- Encargarse de los cuidados que requiere un paciente, persona dependiente o de edad avanzada es una responsabilidad que se extiende 24 horas al día, siete días a la semana. ¿Cómo se enfocan sus talleres y cuáles son los objetivos?
Tenemos dos líneas de formación. Una está enfocada principalmente a los cuidadores de pacientes dependientes que están al cargo de ellos, pero también a toda persona interesada en formarse en educación sanitaria. Cuando tenemos un familiar dependiente en el domicilio el cuidador debe de tener una formación básica de educación sanitaria sobre todo en lo que concierne a las actividades de la vida diaria: alimentación, vestido, movilización funcional, higiene personal y aseo, continencia/control de esfínteres, descanso nocturno, cuidados y ayudas técnicas personales. Nuestro objetivo es dotar de conocimientos suficientes acerca de los cuidados que va a prestar al paciente en el domicilio para disminuir los miedos y la inseguridad a la hora de manejar distintas situaciones, pero también les recalcamos la importancia de potenciar la autonomía de la persona a la que cuidan dentro de sus limitaciones.
Se habla de la disfagia y se dan pautas para alimentar a una persona dependiente de una manera segura gracias al buen manejo de la sonda nasogástrica, espesantes y suplementos. De igual modo, se ayuda a realizar movilizaciones en el domicilio (levantar al sillón, acostar en la cama, llevar al baño) y se aborda el uso de la grúa y de las ayudas técnicas. La higiene, con una práctica de aseo a un paciente encamado, y el vestido según el tipo de dependencia –sin olvidar el uso de pañales- también tienen su propio capítulo. Lo mejor de esto talleres es el intercambio de información que se produce entre los familiares y cuidadores asistentes a las charlas, ya que –al margen de los consejos- favorecemos el debate y el intercambio de ideas.
- La dedicación y exigencia intensiva pueden comprometer notablemente la salud de la persona cuidadora. ¿Qué pautas reciben los cuidadores para afrontar el desgaste físico y emocional?
El otro taller está dirigido a los cuidadores de personas en situación de dependencia, que son las personas (familiares o amigos) que prestan a una persona con dependencia los apoyos necesarios para satisfacer sus necesidades básicas y aquellas otras derivadas de su condición de dependencia. Aunque todos los miembros de una familia pueden prestar los apoyos de forma que se reparte la carga y las responsabilidades, lo común es que exista la figura del cuidador principal: el miembro de la familia que se ocupa mayoritariamente del cuidado del familiar con dependencia, asumiendo un mayor grado de responsabilidad en los cuidados, en el tiempo y esfuerzo invertido y en la toma de decisiones. Las personas cuidadoras están expuestas a un nivel de presión y esfuerzo que a veces no es valorado, pero no olvidemos que repercute directamente tanto en su salud como en la de su entorno
La persona que cuida a otra, a menudo, vive circunstancias que no comprende y que le generan sentimientos de inseguridad y frustración. El cuidado de un familiar repercute en la salud de la persona que lo presta, debido a la gran carga física y psíquica que conlleva. Es necesario sensibilizar a los cuidadores sobre la importancia de su bienestar personal como base para el bienestar “del otro”. El taller ‘Cuidarse para poder cuidar’ pretende dar unas pautas para cuidar de manera personalizada, fomentando la máxima autonomía e independencia de las personas que cuidamos. Está especialmente “dirigido a ti como persona que cuida” para ayudarte a que te sientas bien haciéndolo. Cuidando bien, pero sin renunciar a tu propia vida, ni a tus proyectos. Para cuidar bien es imprescindible empezar por cuidarse a una misma o uno mismo.
- El Hospital San Juan de Dios ha reducido la incidencia de las úlceras por presión en un 65%. ¿en que están trabajando actualmente en este campo?
En 2014 se creó una Comisión de UPP y Heridas Crónicas con el objetivo de minimizar su aparición e incrementar la eficacia de los tratamientos. Una de las principales lecciones aprendidas es que el trabajo del equipo multidisciplinar es clave, tanto en la prevención como en el cuidado, involucrando a las familias en esta atención para hacerlas partícipes de todo el proceso. Es importante también medir y contar con datos adecuados para poder mejorar en cualquier aspecto.
Estas lesiones deterioran la calidad de vida del paciente y la de su familia. Por ello, nuestro Hospital dispone de un protocolo de prevención y tratamiento de las úlceras por presión que incluye la valoración de este riesgo mediante la escala de Braden. Así mismo, se realizan registros fotográficos de las UPP integrado en el sistema de información hospitalaria. Todo ello con el fin de desarrollar planes de cuidados individualizados según el riesgo y en coordinación con otros profesionales. El personal de Enfermería trabaja con servicios como el de Farmacia y Cirugía Vascular, e incluso, está en contacto con el Servicio de Heridas Crónicas del CAULE desde donde nos derivan pacientes para seguir con su tratamiento de curas. La motivación de todos sus integrantes ha propiciado estos resultados tan positivos.
La experiencia del paciente y su familia es lo más importante y, por ello, realizamos educación sanitaria a pie de cama sobre la prevención de UPP, además de cara al alta se les entrega un tríptico de prevención de upp en domicilio. Desde el año 2017 contamos con una guía de buenas prácticas de curas, y en 2018 incorporamos la terapia de cierre asistido por vacío (VAC) en el tratamiento de las úlceras por presión para facilitar su cicatrización, también tenemos implantado el del reloj de cambios posturales, cuyo uso es extremadamente sencillo e intuitivo, y en su momento se dio formación de todo el personal de las unidades de hospitalización.
Además, en 2020 se publicó un protocolo para la diferenciación y tratamiento específico úlceras Kennedy, un tipo especial de lesión cutánea que aparece en los días previos al fallecimiento. Recientemente, hemos desarrollado un nuevo protocolo de cuidados de las lesiones por humedad, el cual hemos divulgado y puesto en marcha en todas nuestras unidades. En él hacemos incidencia de cómo identificarlas y que cuidados tenemos que realizar. Y también contamos en cada unidad con un cartel divulgativo para profesiones del uso adecuado de los productos de curas.
- Enfermería está involucrada en varios de los proyectos del nuevo Plan Estratégico del Hospital. ¿En qué otros proyectos están trabajando?
Estamos desarrollando un modelo de humanización en la salud 4.0 con el fin de aprovechar el desarrollo de las nuevas tecnologías para innovar y desplegar servicios al paciente capaces de satisfacer sus necesidades y expectativas. Así, se está trabajando en un sistema de cita ‘online’ y de seguimiento de pacientes durante su atención en nuestro hospital. Por otro lado, se está desarrollando el diseño de un mapa que nos permita conocer las mejores prácticas que se realizan en el sector sanitario en interrelación con los usuarios para poder tomar decisiones de innovación en este ámbito en el marco de un Hospital sin paredes. Enfermería ha colaborado en el desarrollo de la herramienta Ratenow Analytics 2.0 con el análisis de datos y la propuesta de acciones de mejora hacia el paciente.
